viernes, febrero 13, 2009

La ya casi triste historia de como un hombre casi pierde la cabeza, por lo que intentó escribir el título casi más grande del universo conocido por él

Estoy cansado...










Debo tiempo que no tengo, por lo tanto empeño la vida en pedacitos chiquititos, fáciles de recuperar, en espera de que no se venza el plazo de recuperación.

Siento que le fallo a quienes no debería, sin embargo son ellos quienes mejor entienden las razones, sin siquiera pedir explicaciones.

Veo los fines de semana como un amplio espacio de tiempo en el cual puedo adelantar la semana siguiente y en el cual, solo por unas cuantas horas en la noche no se es prohibido recrear.

Pero hay que ser objetivos, como experimento ha sido bastante efectivo, sin embargo, ya ha dejado de ser tan divertido.

Todo esto, solo por buscar el "bien mayor". Pégate la pela de una vida, para que cualquier niño bonito llegue y te ponga el pie al cuello(o donde le plazca). Para entonces, habrás de tener clavos en la espalda, porque nada es fácil cuando vives abajo

Puta, en serio que ya no es tan divertido.

Sheko.

2 comentarios:

Luis G. dijo...

Vaya, no crei que estuvieras con todo eso encima. Pero son etapas, esperemos. Todos tenemos dias, semanas, meses o incluso años cabrones en donde te sientes de la chingada. Metele ganas compa!

el teletubi dijo...

por primera vez, no se que decir..