*Sigh*
Aún recuerdo cuando los limpiavidrios te pedían permiso para lavar tu carro. Ahora simplemente te atacan como película de zombies locos, atacando en manada y cuando uno menos se lo espera y es por eso que siempre, o casi siempre, me sacan un pedo pues siempre llegan desde atrás.
Ahora estaba en un semáforo, esperando el verde, cuando derrepente SPLASH! Un chorro de agua cae sobre el parabrisas. Hijo de su madre, me cagué como no tienen idea. ¿Pa' qué pues, pa' qué? Pero todo lo malo que les pasa, ellos se lo buscan
-Cabroooon, no mames. No tengo nada de feria.
-No importa, jefe. La feriesita es buena.
-Es neta, no traigo.
-Lo que me quiera dar, jefe. Cero placa. (¿Por qué chingados dicen así?)
-Bueno pues! No te voy a dar nada.
Y claro, me mentó de la madre cuando arranqué el carro, bajé el vidrio y le tumbé su botella con agua.
Lo vi llorar por el espejo retrovisor.
Nota mental: Me dolió más a mí que a él.
Sheko.