I've got a soul but I'm not a soldier

El fin de semana no fue para nada como me lo esperaba, quizá fue por el viernes 13, quizá el destino, quizá porque el mundo es cabrón. De seguro nada de lo anterior tuvo que ver, solamente yo, las actitudes y las decisiones. Siempre nos gusta culpar a los demás a pesar de saber que la culpa es nuestra. Esta vez es diferente, si las cosas pasan o no pasan no es por algo, es por mí y nada mas por mí.

No, no terminé flotando completamente ebrio en una alberca, ni siquiera terminé completamente ebrio sino tan solo medio ebrio y con una fractura un poco más grande justo en medio de mi ventrículo izquierdo.

Sentado en una casa sin muebles pude ver lo vulnerable que somos, platicando con una de las únicas personas con quien he sido abierto y completamente honesto, ahí donde soy transparente y no ocupo palabras.

Hoy me enteré que una de las primeras amigas que hice en mi vida, allá en mis primeros dos lustros de vida, casi muere por culpa de la bulimia y se encuentra hopistalizada ¿Qué carajos estaba pensando? En nuestro pinche afán por distinguirnos de los demás hemos perdido nuestro individualismo y es hasta muy tarde que nos damos cuenta de ello.

En fin, ¿Qué quedará en mis recuerdos? El haber dado la orinada más larga de mi vida en plena vía pública y quizá un sentimiento como agruras cruzado con un amargo sabor de boca.

Nota mental: ): :) Tan solo hay que cambiar los ojos con que ves las cosas.

Sheko.

...no psz wow!!